Despedida de soltero Maastricht

Un crucero por el Mosa, explorar la ciudad o disfrutar de la naturaleza: Maastricht, en los Países Bajos, es el destino de los bon vivants, los amantes de la naturaleza y cualquiera que desee vivir una despedida de soltero inolvidable. La capital de la provincia holandesa de Limburgo es una de las ciudades más antiguas de los Países Bajos. En Maastricht le espera una mezcla única de monumentos históricos y atracciones culturales.  

Idílico lugar Vrijthof

Uno de los lugares más bonitos de Maastricht es el Vrijthof, una plaza interesante e idílica. En el corazón del Vrijthof se encuentra la iglesia de San Juan, que destaca desde lejos por su torre roja. Si quieres tener una buena vista del Vrijthof, puedes subir a esta torre roja de la iglesia y verlo todo desde allí. Junto a la iglesia de San Juan hay también muchos otros edificios históricos, como la iglesia de San Servacio. Recuerdan la época en que Maastricht era un centro religioso y una ciudad fortaleza militar. Los cafés de los alrededores invitan a tomar un café o una cerveza, desde donde se puede admirar el animado y vibrante Vrijthof.

Basílica de Nuestra Señora y visita turística subterránea

El monumento más antiguo de la ciudad es la Basílica de Nuestra Señora. Construida en el año 1000, se alza a orillas del Mosa. Es un hito de la arquitectura romana y posee numerosos objetos eclesiásticos. Una característica especial de Maastricht es la visita turística subterránea. Aquí descubrirá los diferentes lugares de interés no en la calle, sino bajo la calle. Pieter, las Grutas del Norte o las Grutas de Zonneberg.

Fuerte de San Pedro

El Fuerte de San Pedro data del siglo XVII y está situado en la parte sur de la ciudad. En su interior encontrará aspilleras y fuentes, y en el exterior el fuerte ofrece una hermosa vista. Las paredes de las Grutas del Norte están decoradas con ilustraciones, datos interesantes e historias. Estas grutas se encuentran en las profundidades de San Pietersberg y en su día sirvieron de protección contra el asedio francés. Con techos de hasta 10 metros de altura, las Grutas de Zonneberg dan una impresión increíble. Se construyeron para dar cobijo a unos 47.000 ciudadanos de Maastricht durante la Segunda Guerra Mundial.